sábado, 3 de marzo de 2012

Mago Entonado Blanco

El poder de la Atemporalidad nos lleva a hallar el propio centro; encontrar "el rostro original", amar lo que encontramos dentro en donde ya no hay máscaras, en donde nos permitimos SER. Para lograrlo, basta con voltear el espejo hacia adentro y llevar allí nuestra mirada....hoy....el Tercer Ojo, la visión. Nos instalamos en el PRESENTE donde radica la atención pura y por lo tanto la puerta hacia nuestro corazón. En tanto rumiemos el pasado estaremos en la memoria virtual, perpetuando roles, personajes, identificaciones, en pleno drama emocional.....En tanto el pasado nos haya recordado el suficiente dolor emocional.....el miedo a volver a vivirlo----y lo cómico es que volvemos a vivir una y otra vez aquello donde se fija nuestra atención!!!!----anticipa estrategias para un futuro....imaginando situaciones similares que cargamos con la emoción transferida...........y después nos sorprendemos cuando vivimos "Una historia interminable"...siempre la misma.....la que evocamos y convocamos con el pensamiento, que no pacificó en el perdón.
Hoy al poder guía lo vamos meditar sobre su aspecto de camino hacia la vivencia del PRESENTE, continuo...., el ETERNO AHORA, por eso se lo llama el NO TIEMPO , desde la perspectiva cronológica. Pongamos la atención en nuestra respiración, como mecanismo para cambiar nuestro centro de gravedad hacia el Tan Tien (zona del ombligo)...el lugar de contacto con el SER; como medio para aprender a concentrarnos en algo fisiológico, que a su vez religa la mente con el cuerpo....unificación indispensable para permanecer en el Ahora....y obrar en consecuencia. Inspiro expandiendo hacia afuera el ombligo.....retengo con aire un instante a lo que llamamos pausa con aire. Exhalo hundiendo el ombligo hasta sacar todo el aire y sentir la presión en la zona lumbar y renal. Retengo un instante sin airey recomienzo.
El Perro nos dice en esta onda encantada, que para aspirar al Amor.....necesitamos comandanos desde la autoridad que nos faculta el PRESENTE.

No hay comentarios: